El equipo del programa de televisión Cuarto Milenio, liderado por Iker Jiménez, ha llevado a cabo un innovador experimento con el objetivo de estudiar científicamente los efectos de la ouija, tradicionalmente considerada un juego con resultados impredecibles.
El espacio ha querido ir un paso más allá de la mera especulación, sometiendo a un grupo de sus colaboradores, entre ellos Aldo Linares y Clara Tahoces, a una sesión de ouija bajo un riguroso control científico. Los participantes fueron monitorizados en todo momento para registrar sus reacciones e impresiones, un enfoque pionero en la televisión.
El experimento fue dirigido por el estadístico Álex Escolà-Gascón, quien preparó un entorno para que los sujetos entraran en la dinámica, lanzando la pregunta clave al tablero: «¿Hay alguien ahí?». La seriedad del proceso se reforzó con la colocación de un electroencefalograma en Aldo Linares, justo antes de que el tablero comenzara a ofrecer respuestas.
Reacciones y Respuestas Inesperadas

Simultáneamente a la sesión de ouija, y como parte del control experimental, el equipo de Escolà-Gascón proyectó imágenes que los participantes no podían ver, pero a las que debían reaccionar emocionalmente. Sorprendentemente, la ouija también pareció responder a estas imágenes.
Los resultados, calificados como «completamente fascinantes», han abierto un sinfín de interrogantes. ¿Son respuestas reales del tablero o el movimiento es inconsciente por parte de los participantes? ¿De qué manera las imágenes proyectadas alcanzan la mente de los colaboradores? ¿Juega la autosugestión un papel fundamental en el proceso?
Para analizar en profundidad el experimento, Cuarto Milenio ha contado con la presencia de Álex Escolà-Gascón, estadístico de la Universidad Pontificia de Comillas, y Julián Benito-León, médico neurólogo y profesor de la Universidad Complutense de Madrid, quienes ofrecieron sus perspectivas expertas sobre los datos obtenidos en esta investigación inédita.















