El Hospital General Universitario Doctor Balmis ha inaugurado un nuevo y significativo espacio en su Unidad de Medicina Paliativa, un rincón concebido bajo la filosofía de la humanización para ofrecer un entorno más cálido, íntimo y humano a pacientes, sus familias y el equipo sanitario.
Ubicada en la unidad de hospitalización de Medicina Interna (8ª A), esta sala terapéutica ha transformado el antiguo solárium en un ambiente de confort, dotado de sillones, mesas y elementos que buscan alejarse de la frialdad clínica. Este proyecto subraya la importancia del entorno no solo físico, sino emocional y humano, en la atención integral al final de la vida.
Un Lugar para el Acompañamiento y la Dignidad
El Dr. Joaquín Portilla, jefe del Servicio de Medicina Interna, y la Dra. Raquel Soriano, responsable de la Unidad de Medicina Paliativa, han destacado la necesidad de este espacio. «Los pacientes ingresados y sus familias afrontan un alto impacto emocional, social y espiritual,» señaló la Dra. Soriano. «Les ofrecemos la atención biomédica necesaria, pero precisábamos de un espacio específico de acompañamiento terapéutico y relacional.»
El objetivo es crear un lugar «distinto a la habitación hospitalaria», donde los pacientes puedan celebrar momentos importantes, despedirse de sus seres queridos o simplemente compartir un café, según explicó la Dra. Soriano. Este enfoque se alinea con la creencia de que, si bien «no siempre es posible curar, sí es posible cuidar,» y que un entorno humanizado no solo alivia el sufrimiento, sino que dignifica el final de la vida.
Conchi Dapena, supervisora de Enfermería de Medicina Interna, reforzó esta visión, indicando que «en la etapa de final de la vida, donde el sufrimiento físico y emocional pueden ser intensos, el entorno adquiere un papel terapéutico en sí mismo: aliviar, calmar y dignificar la experiencia del cuidado.»

Reconocimiento a la Humanización
Este proyecto consolida el compromiso del Hospital Doctor Balmis con la humanización de la asistencia, una labor que ya fue reconocida con el Premio Consalud 2024 al Centro Humanizado mejor valorado del país para su equipo de Cuidados Paliativos.
El acto de inauguración, que contó con la presencia del equipo directivo del hospital, fue un evento íntimo que incluyó la donación de obras de arte. El Colectivo Mediterráneo (Jaume Marzal, Isabel Rico, José Luis Rico, Salvador Galán y Conchi Romero) donó cinco cuadros, y Eva Fajardo Blasco, secretaria de Medicina Interna, aportó una obra propia para dar color y calidez al nuevo rincón.
El director médico, Diego Díez, agradeció la «magnífica labor» del equipo, destacando que el nuevo espacio es prueba del «esfuerzo que cada día vuelcan en mejorar el bienestar de sus pacientes.»
El evento también sirvió como emotivo homenaje de despedida al Dr. Portilla, quien se jubila tras más de tres décadas al frente del Servicio de Medicina Interna, dejando una «trayectoria excelente y ejemplar» y una «huella imborrable» en el centro, según palabras del director médico.















