-
FOJI, acrónimo de Fear of Joining In (miedo a unirse)
-
Hay quien no quiere unirse a las redes sociales y otros que sienten ansiedad por si no obtienen el “me gusta”
-
El exceso de enganche a las redes sociales produce aislamiento, inseguridad, que se combate con el diálogo y la conversación
-
El enganche a las redes perjudica la relación de pareja porque se pueden originar conflictos por “infidelidad virtual”
A pesar del auge de las redes sociales, hay personas que no quieren sumarse al fenómeno de masas de las redes, porque pueden estar en contra de formar parte de las plataformas sociales. A algunas personas les produce ansiedad esperar al “me gusta” o que sus publicaciones no sean bien recibidas y no obtengan seguidores.
El experto en comunicación social de la Fundación Casaverde, Julio García Gómez, destaca el peligro del abuso de las redes sociales que limita el comportamiento personal de los individuos, impidiendo una comunicación interpersonal directa y el desarrollo de habilidades verbales y gestuales para el diálogo y la conversación.
El exceso de enganche a las redes sociales produce aislamiento, inseguridad y falta de confianza en las competencias transversales de comunicación de adultos y jóvenes, que causa conflictos en su relación personal, familiar y social. Las consecuencias de estar permanentemente conectado a las redes sociales, limita la relación familiar por las siguientes razones:
- No se comparten las vivencias propias del núcleo familiar entre padres e hijos y se pierde la interacción de unos y otros.
- Aisla a los adultos de los niños porque el tiempo que pasan en las redes no lo dedican a la conversación con ellos y no conocen en detalle sus vivencias y sus problemas.
- Perjudica la relación de pareja porque se pueden originar conflictos por “infidelidad virtual” si se está más pendiente de las relaciones en internet que del propio contacto con la otra persona que hemos elegido para convivir.
En las áreas de relación social y profesional, se limita nuestra capacidad de comunicación debido a la excesiva conexión a las redes, por los siguientes motivos:
- Hay un distanciamiento físico entre las personas ya que todo se vive a través de las pantallas y el móvil por lo que se pierde la faceta emocional y se puede desvirtuar la imagen que tenemos de los demás.
- Se originan conflictos laborales por la falta de diálogo personal con el staff directivo y entre los profesionales de las empresas al estar todo encauzado en la comunicación online.
- Se pierden los hábitos y habilidades de comunicación verbal y gestual que son necesarios para la relación con otras personas de nuestro entorno y dificulta la difusión del conocimiento especialmente en las etapas de educación primaria y posteriores en resto de etapas como bachillerato y universidad.
Por todo ello, habrá que medir muy bien el tiempo de exposición y uso que se hace de las redes sociales ante fenómenos como el FOJI, que se produce en algunas personas que no quieren o tienen miedo a unirse a las redes, y que debería suponer un mayor fomento de la comunicación interpersonal, del uso de la palabra, el diálogo y la conversación.