El Palacio de la Magdalena tiene varias curiosidades entre sus muros. Le invitamos a conocerlas en este artículo.
Es un singular y bello edificio situado en la península de la Magdalena frente a la isla de Mouro, en la ciudad de Santander (España). Fue construida entre 1909 y 1911 a iniciativa del Ayuntamiento de Santander y pagado por suscripción popular para que lo utilizara la Familia Real española. Con esto los ciudadanos de Santander se garantizaban que fuera en vacaciones la Familia Real y buen parte de miembros de la Corte que les acompañaban en época estival. Fue una buena iniciativa, una perfecta campaña de marketing que se diría ahora. El Rey Alfonzo XIII y su familia utilizaron este palacio como residencia de verano entre 1913 y 1930. Los santanderinos habían culminado con éxito su propósito.
La II República se lo incautó al Rey Alfonso XIII, como hizo con todos los bienes personales del monarca, cuando inició su exilio fuera de España. Durante la Guerra Civil española el palacio fue utilizado como hospital de sangre. En 1941, durante el incendio histórico que sufrió el centro de Santander, el palacio se convirtió en la residencia temporal de la mayoría de los afectados.
En 1977 el Conde de Barcelona, abuelo del actual Rey Felipe VI, lo vendió a Instituciones Públicas del Estado, a un precio testimonial palacio y finca que lo rodea al Ayuntamiento de Santander por 150 millones de pesetas cuando su valor era muy superior. Don Juan puso tres condiciones: que el Parque de la Península fuera público; que varias habitaciones quedaran reservadas al uso de miembros de la actual Familia Real española; que se mantuvieran los cursos de verano de la Universidad Menéndez Pelayo que ya se impartían allí en tiempos del Rey Alfonso XIII.
El palacio fue declarado monumento nacional en 1982. Es famoso por su arquitectura ecléctica y uno de los monumentos más visitados de Cantabria. Actualmente alberga la sede de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo y son muy nombrados sus cursos de verano en sus instalaciones. Cuenta con salas de conferencias y reuniones que pueden acomodar alrededor de 300 y 200 personas respectivamente. El palacio también está abierto al publico durante todo el año con visitas guiadas.
